Lo erótico en las palabras, la música y los sentidos

El significado del término y concepto erotismo viene del étimo griego <<ερως>> <<érōs>>, que significa amor o deseo, y del sufijo «ismo», actividad, doctrina o teoría. Por lo tanto, el erotismo es la práctica o la teoría del amor, impulso o deseo sexual. Por mi parte, son tres cosas las que me vienen a la mente cuando pienso en erotismo: palabras, música y sentidos. Considero que en estos tres aspectos de la vida están relacionados por una conexión tan profunda que apenas puede ser esbozada. Es para mi tan honda dicha conexión que es inefable.
Las palabras podrían llegar a parecer uno de los mejores métodos de expresión: se nos ha enseñado que con estas se mueven masas, países, sentimientos y afectos alrededor del mundo. Sin embargo, creo que estas mismas, el lenguaje en sí, tienen límites. Uno de esos límites a los que me refiero es la comunicación de ciertas experiencias, como lo son el erotismo, la música y otro tipo de vivencias que hasta hoy no tienen nombre o ubicación definida –la mente, por ejemplo, que todo mundo tiene una y dispone de ella, pero no se sabe bien dónde está ni cómo es que funciona–.
La música, bajo mi punto de vista, es indescriptible e indecible: solo podemos hablar de ella mediante símiles, metáforas y de manera formal si es que llegamos a tener los conocimientos necesarios para analizar partituras, tempos e instrumentos, sintetizadores o compresores. De igual manera, la música mueve masas, países, sociedades enteras. No obstante, debido a su poder que incluye o no versos y palabras, a la música se le rinde un culto silencioso: masivo, mediático, pero callado en explicaciones al respecto de lo que es en realidad y objetivamente.
Los sentidos, la referencia y evocación a ellos en toda producción cultural pueden tener cierto grado de erotismo. Por supuesto. Pero es más importante e intenso, en mi opinión, cuando lo sensorial es evocado y conjurado sin otro interés más que el de sentir los sentidos. Me refiero a que todo puede tener algunos aspectos del erotismo si se apela a las capacidades del cuerpo de sentir su alrededor, ya sea en comerciales, pornografía, telenovelas, etc.; sin embargo, cuando lo sentidos son conjurados con el único fin de ser experimentados, en vez de fines de lucro, políticos, económicos o de biopoder –comprar un producto, vender la idea de cuerpo y sexualidad que mejor le convierte a la industria en general–, entonces la cosa es diferente. Cuando la representación y evocación a los sentidos solo apela a ellos mismos, el cuerpo se convierte en un campo de batalla.
Pero ¿esto que tiene que ver con lo erótico? Mucho. El silencio que caracteriza a la música, lo corporales que son los sentidos, y los límites del lenguaje y la comunicación, son parte de la vivencia del erotismo. Este, la practica o la teoría del amor, el impulso y deseo sexual, por su lado, no puede ser comunicado fácilmente. Por eso se acude a la poesía y al silencio, a lo inexplicable, a los límites. Para así dar a entender únicamente un poco del espasmo de un cuerpo y mente experimentando lo erótico.
Considero que la música puede llegar a ser disfórica, eufórica y erótica gracias a que no nos da cuartada ni trinchera donde resguardarnos a la hora de hablar de ella. Solo podemos sentirla y sentirnos sintiéndola. El ejemplo que me viene en este momento son dos álbumes: Mezzanine, de Massive Attack, y The Age of Adz, de Sufjan Stevens. “Angel” y “Risingson”, incluidas en Mezzanine, son canciones que crean una atmosfera y un espacio amenazante y erótico a la hora de jugar con la voz como instrumento, los versos y los sonidos. “Futile Devices” y “Too Much”, en The Age of Adz, son piezas que, junto con lo aturdidores y raros que son sus sonidos y melodías, ejemplifican el sentido destructor de las palabras:
I think of you as my brother
Although that sounds dumb
And words are futile devices. (Stevens, “Futile Devices”)
There’s too much riding on that
There’s too much, too much, too much love …
There’s too much riding on that
There’s too much riding on that word. (Stevens, “Too Much”)
Considero que las palabras, en su infinita sabiduría y dentro sus infinitos límites, son eróticas ya que mapean el cuerpo, la mente, afectos y un sinfín de espacios y objetos que son permeados por el deseo, el impulso y el amor. Un ejemplo de esto es la descripción de un cuarto, un objeto amado y, más precisamente, la descripción del cuerpo/yo propio, deseante, y del cuerpo/sujeto deseado. Pareciera que las palabras, a pesar de sus límites, toman el papel de un virus: se contagian y se esparcen por la realidad, adjetivando, transformando y reconfigurando el mundo:
Márcame, rásgame con el filo de tu sable.
Quita matando lo que cobarde teme
La temerosa de mi nombre. Te digo: ¡dame! (Boullosa, 09)
Considero que lo sentidos, al evocar directamente al cuerpo, al entorno, al espacio y a los objetos, son eróticos por naturaleza. Cuando anteriormente dije que la representación y evocación de los sentidos hacía del cuerpo un campo de batalla me refería al hecho de que lo sensorial es un input que difícilmente tiene un output. La batalla es entre lo externo, la información que recibe nuestra mente y cuerpo, nueva o ya conocida anteriormente, y lo interno, la manera en que procesamos dicha información y la queremos traducir en conocimiento, arte u otro tipo de producción cultural. El problema, o el struggle, está en la manera, en las palabras, justas o desatinadas, en las imágenes, en la forma con la que expresamos la información.
Mediante las palabras, los sentidos y la música, principalmente, es una de las formas de vivir el erotismo: como una amalgama y una lucha entre lo posible de sentir y lo imposible de decir.
En el minuto 1:47 de la canción “Risingson”, de Massive Attack, se escucha el siguiente verso: “Toy-like people make me boy-like”. Bajo el sentido que despliega este verso, puede verse lo erótico como un abrir de ojos, un darme cuenta de que hay más piel fuera de la mía, y más ideas y conceptos que encarar. Como algo subversivo, mediado por palabras, música, imágenes, sentidos, algo que rompe y crea a la par. Como algo tierno, dulce, paz.
Obras citadas
Boullosa, Carmen. “La bebida”. La bebida. Fondo de Cultura Económica, 2002, pg. 11.
“Erotsimo”. Definiciona, definición y etimología. https://definiciona.com/erotismo/.
Massive Attack, "Angel”. Mezzanine. Virgin Records Limited, 1998, https://music.apple.com/mx/album/mezzanine-deluxe/1428684976.
---. "Risingson”. Mezzanine. Virgin Records Limited, 1998, https://music.apple.com/mx/album/mezzanine-deluxe/1428684976.
Stevens, Sufjan. “Futile Devices”. The Age of Adz. ASTHMATICKITTY, 2010, https://music.apple.com/mx/album/the-age-of-adz/392327958.
---. “Too Much”. The Age of Adz. ASTHMATICKITTY, 2010, https://music.apple.com/mx/album/the-age-of-adz/392327958.